El Primer Escándalo

Aunque un poco tarde (he estado mal de tiempo) no quería dejar pasar la oportunidad de comentar esta noticia. No han pasado tres meses y ya tenemos el primer escándalo por el lado de Valencia Cossio, esta vez fue su hermano, Guillermo León, el de la fiscalía, el que también parece estar hundido hasta el cuello en la organización de alias Don Mario según informa la revista Cambio. Las conversaciones entre Valencia Cossio (Guillermo León, claro está, Fabio no tiene nada que ver) y el presunto narcotraficante Juan Felipe Sierra hacen pensar que el primero movió sus fichas para hacerle trabajos a miembros de la organización delincuencial de Don Mario. ¡Lo curioso es que todo este asunto se vino a saber por la investigación hecha al caido narcotraficante y hermano del General Oscar Naranjo!
Obviamente en todo este episodio queda mal el ministro de interior, pero también queda mal la fiscalía al no haber destituido inmediatamente al funcionario por más hermano del ministro que sea, solo hasta convertirse en escándalo público tomó cartas en el asunto, supuéstamente el mismo día el fiscal Valencia renunció, solo que esta carta nunca llegó a manos del fiscal general, valiente gracia.
Volviendo al ministro de interior, muchos han pedido su cabeza y no es para menos, en mi caso, no la pido por este asunto, la pido sencillamente desde su nombramiento, por lo que Fabio Valencia Cossio representa y también se que por esta misma razón no va a pasar nada, Fabio, a diferencia de Guillermo León es muy hábil y no se va a dejar sacar con tanta facilidad. En este punto estoy por pensar que no solamente es un político mañoso también tiene una suerte increible, justo cuando estaba en el ojo del huracán el presidente, la corte y su enfrentamiento lo salvan y le quitan toda la presión.
Por lo pronto, las cosas por el lado de Valencia Cossio seguirán igual, sin embargo, no es la mejor forma de iniciar su gestión, han pasado tres meses y sus reformas políticas pretenciosas no han cuajado, tampoco su interés por acercar el presidente y las altas cortes, lo único que ha hecho bien es capotear el escándalo de su hermano, de Guillermo León, el de la fiscalía.

Una Marcha Peligrosa

Lejos de ser una marcha como la que hizo en el pasado, el Profesor Moncayo planea embarcarse en una nueva jornada a pie, esta vez, por la selva (con toda su vastedad) colombiana. De alguna forma en la primera marcha Moncayo logró su objetivo, logró que habláramos nuevamente de los secuestrados, logró sacar a su hijo y a los otros rehenes del cautiverio que significa el olvido de la sociedad. Pero esta otra historia, el tamaño de la travesía todos los riesgos que implica, raya en lo absurdo. No es solamente lo agreste del recorrido, es saber que la posibilidad de rescatarlos por esta vía es nula y más aún, la oportunidad para que las FARC se queden con otra víctima para fortalecer su trueque diabólico es perfecta. Me cuesta mucho estar en los zapatos del Profesor Moncayo y asumo que esta acción obedece al desespero ante la prolongada ausencia de su hijo y no a una equivocadísima forma de llamar la atención nuevamente.