sábado, 24 de mayo de 2008

Todavía No

A propósito de la muerte de Tirofijo, es prudente que tanto el gobierno (en especial el ruidoso ministro Santos) y nosotros, la sociedad civil, no cantemos victoria. Si la muerte de Marulanda Vélez es un hecho, no significa que las FARC estén acabadas, el impacto de su muerte es contundente, de eso no hay duda, es un golpe a la unidad del grupo guerrillero en un momento difícil, muy difícil como lo es este. El deceso del guerrillero septuagenario no es el sinónimo del fin del grupo armado, sin embargo, si se le suma la ofensiva del gobierno colombiano va a significar un cambio en el orden y proceder de las FARC.Con esta muerte, anticipo una profunda crisis en la que algunos comandantes armarán rancho aparte, a pesar del riesgo que significa salirse de las filas. También, la moral de los combatientes encontrará su punto más bajo, sin duda, Tirofijo era el icono por excelencia de la base armada del grupo. A pesar de esto, hoy no tiene la fuerza suficiente para convertirse en leyenda, quienes mueren en la cúspide de su obra, trascienden a leyenda, Tirofijo por el contrario, estaba en franca decadencia.
Finalmente, esta es una oportunidad única, lo que muchos presidentes esperaron con tanta ansiedad, finalmente se le dio a Uribe que parece caer parado siempre, y por eso es preciso capitalizarla, sin cantar victoria, sin desfallecer en la tarea emprendida hace 6 años se debe continuar, no va a ser el fin de las FARC, en Colombia nunca vamos a vivir en paz, pero si es la oportunidad de devolver el conflicto con este grupo a su justa medida.

domingo, 18 de mayo de 2008

Acierto y Desacierto

De acuerdo con los confidenciales de Semana el gobierno salió a desmentir los rumores que circulaban acerca del posible nombramiento de Clara Rojas en la cartera de Relaciones Exteriores, afortunadamente el presidente Uribe entendió que las relaciones de Colombia con el mundo deben estar en cabeza de alguien diferente a una víctima del secuestro, alguien que haya vivido de acuerdo con el orden mundial vigente, la idea no es mala, pero el efecto mediático que genera una decisión de esta naturaleza ya se desperdició con el insulso y dos veces ministro Araujo, dudo mucho que Clara Rojas con Emanuel a bordo generen simpatías con los gobiernos vecinos en esta difícil situación que atraviesa el país. Jaime Bermúdez parece ser entonces el candidato, a mi juicio, y con muy poca información, un candidato acertado, un hombre de la casa, que ha seguido el ritmo de trabajo de Uribe y al parecer una persona decente, un acierto.

La otra cara de la moneda puede ser el ministerio del interior, en el “sonajero” (odio esta expresión) de candidatos, el más fuerte a suceder al vetusto y somnoliento ministro Holguín es nada más y nada menos que Fabio Valencia, sin hablar de lo que puede representar este personaje (política amañada), el presidente necesita en este ministerio a alguien de mucha confianza y habilidad, lo segundo lo tiene, pero en lo primero tengo seria reservas, no confiaría nada al ex senador antioqueño, nada. Por donde se le mire este nombramiento es un total desacierto, es continuar con las prácticas políticas que tanto daño le han hecho al país, la cartera de interior en cabeza de un personaje oscuro como Valencia es como dejar al diablo cuidando ostias.

martes, 13 de mayo de 2008

Los Paramilitares

Todavía no he digerido del todo la noticia de la extradición masiva de los otrora jefes paramilitares, por lo pronto estas son algunas de mis conclusiones:

  • El golpe mediático es absoluto, tal como nos tiene acostumbrados este gobierno, semana de por medio recibimos una noticia impactante y contundente, que habla de la efectividad de la administración Uribe. El más desconfiado puede pensar que hace parte de un cronograma de actividades diseñado paso a paso para que los índices de favorabilidad de Uribe nunca estén por debajo del 70%. Si se lee con detenimiento los comentarios en los principales medios es de total apoyo al gobierno y el presidente es una vez más el redentor salvado de nuestro país.
  • Si existe algún vínculo demostrable entre Uribe y los paramilitares y estos asumen su extradición como una traición, el momento de hablar ha llegado lo cual desencadenaría una serie de situaciones que pondrían en riesgo la gobernabilidad y la legitimidad de la presidencia de Uribe, creería uno que es poco probable que esto suceda, ante todo, este gobierno es astuto y no creo que se arriesgue a semejante aventura.
  • Ahora, si de buscar conspiraciones y de identificar el modelo maquiavélico de Uribe se trata, entonces la ocasión es perfecta. Un acuerdo interno entre la justicia americana para que los paramilitares reciban penas blandas y un show bien montado con operativo en simultanea desde las cárceles de máxima seguridad con Jorge 40 incluido gritando sandeces son suficientes para que en Colombia creamos que tenemos presidente de mano firme y decisiones acertadas sin compromiso con ningún actor armado.
  • Sin duda, el gobierno empleará la extradición de los principales actores de las muertes de a sindicalistas como su derrotero para tener mayores argumentos a favor del TLC, quien lo creyera, finalmente, los paramilitares adquirieron el carácter político que siempre pretendieron. Lo cierto es que veo muy remota la posibilidad de que con la extradición de estos 14 narcoparamilitares paren las muertes de sindicalistas y se apruebe el TLC.
  • Para los que creen que extraditar a los paramilitares erosiona cualquier acuerdo con grupos armados en el futuro, se equivocan, y lo hacen porque desde el principio se sabía que no se negociaba con una contraparte legítima, eran narcos vestidos de camuflado y no un grupo con un ideal, lo mismo sucede con la guerrilla y con cualquier grupo de bandidos de los que hoy pasan por bandas emergentes.

Por lo pronto, esa es mi opinión y estas, algunas dudas por resolver:

¿Qué pasará con reparación a las víctimas? Con seguridad nada.
¿Existe alguna forma de juzgar a los paramilitares en Estados Unidos por crímenes de lesa humanidad?
¿Qué argumentos tendrán ahora Chávez y Correa para acusar al gobierno de paramilitar?

lunes, 12 de mayo de 2008

Cabas VS Fonseca

Aclaro que no considero ni a uno, ni a otro virtuosos de la música, es más, jamás compraría un CD de Fonseca ni tendría el afiche de Cabas en mi cuarto, simplemente son productos de la “creciente” industria musical colombiana. Como productos Fonseca es una fórmula probada, no ha creado nada, cada día se parece más a alguien que en su momento innovó, Carlos Vives, por esta razón resulta muy fácil oírlo y sus canciones pegan en la radio local y en uno que otro nicho de mercado en diferentes países. Pero es eso, un seguidor, el camino fácil, estratégicamente errado por que difícilmente se puede llegar más allá de lo que hizo Vives en su momento, incluso, el creador de esa fusión de acordeones con guitarras eléctricas parece estar decidido a alejarse de este tipo de música o de volver al vallenato básico, pero eso es otra historia. Cabas, por el contrario ha decidido (o por lo menos eso parece ser su primer sencillo) alejarse del desgastado tropi-pop. No sé cual vaya a ser el resultado, si su música llena estadios, agota las estanterías de las tiendas de discos o se convierte en el artista mas descargado en ringtones me puede importar menos, como producto lo ha hecho bien, ha cambiado, por lo menos intenta proponer algo diferente a la formula probada de las enmelocotadas y movidas melodías que por hoy se oyen en la radio.

México y Colombia, Una Historia en Común

El periódico El Tiempo resume hoy la sangrienta situación por la que atraviesa México en su lucha contra los carteles de la droga que hoy por hoy son los que realmente controlan el negocio. Se veía venir, la mezcla entre corrupción de las autoridades y la excelente posición estratégica en la frontera con el mayor consumidor de alcaloides del mundo convirtieron a México en terreno fértil para que prosperara el negocio. Pero también se veía venir la guerra, primero entre carteles, de hecho, esta lleva mucho y los gobiernos de turno le dieron la espalda por estar de involucrados de alguna forma (no olvidemos al hermano de Salinas, el famoso Mr. 10%).
Ahora, es la lucha del gobierno frente a los carteles, supuestamente, en lo corrido del año ya van 1.200 muertos y el numero con absoluta certeza ha de crecer. Los dos bandos, gobierno y narcos, deben retroceder un poco en el tiempo y mirar hacia el sur para darse cuenta que es cierto que la historia se repite y que aquí ya vivimos esa misma guerra, México hoy debe ser igual a Colombia a finales de los 80 y principios de los 90.

Como decía si los dos bandos se detuvieran a analizar el caso colombiano se darían cuenta que nadie ha podido vencer a un estado medianamente consolidado, no lo hicieron en Colombia y difícilmente creo que sea posible en México, es absurdo y de una ignorancia sin límites creer que un delincuente por más organizado que se encuentre puede vencer a un estado como el mexicano o el colombiano. Por otro lado, es urgente que el gobierno mexicano tome medidas para devolver el problema a sus proporciones aceptables, el problema no se va a acabar nunca, en la medida en la que sea ilegal y existan compradores, alguien va a intentar vender sin importar el riesgo; lo que no se puede permitir es que se salga de su curso y logre las dimensiones del problema colombiano, eso nunca.

Desafortunadamente, desde mi pobre conocimiento de la realidad mexicana creo que tienen todo para repetir la historia colombiana, una guerrilla en el sur sin recursos para su lucha, con una población pobrísima que puede encontrar en el narcotráfico esa anhelada fuente de ingresos y unos narcos en el norte dispuestos a hacer alianzas con quien toque para sacar adelante su negocio, todo esto, sumado a una policía y un ejército con niveles de corrupción peores que los colombianos, el escenario es ese y el resultado puede ser fatal, como lo es la realidad colombiana. Insisto, uno y otro debería para por un segundo y ver cómo mover sus fichas para salir bien librados.

domingo, 11 de mayo de 2008

Perro Come Perro

Si se aísla por unos días de la prensa local (Colombia) y logra llegar desprevenido a la sala de cine se deslumbrará por los primeros 5 minutos, el tiempo que se demoran los créditos. La estética no puede ser mejor, la imagen del perro callejero engrandecida, nunca antes había visto a un gozque tan bien. A partir de ahí, se va en picada y nada la rescata de ser una versión actuada del Espacio, es horrible, la violencia y la sangre son gratuitas. Entiendo que las historias que produce el cine nacional son el reflejo de nuestra sociedad, pero la saturación del espectador debe ser un hecho, por lo menos lo es para mí. Por rescatar la actuación de Oscar Borda, excelente, nada que hacer. La película es un perro ruidoso (por la prensa), de esos que ladran y ladran y al final no hacen nada, solo nos incomodan.
Por mas galardones (Sundance, Miami Film Festival, Festival Internacional de Guadalajara) que tenga no puedo encontrarle el sentido a la historia, no puedo.

domingo, 4 de mayo de 2008

Inside Job

No cabe la menor duda que la política de recompensas del gobierno Uribe (los anteriores también la han usado) ha dado resultados: jefes paramilitares, comandantes guerrilleros, capos del narcotráfico y delincuentes comunes, todos han caído por que al interior de sus estructuras alguien se cansa de la vida de prófugo, del maltrato de sus superiores o simplemente porque el dinero es una tentación enorme. El resultado mediático (como prácticamente todo en este gobierno) es impactante, y claro, nos alegramos por estar ganándole la lucha a la delincuencia común y organizada ¿Pero realmente estamos ganando? Moralmente, perdemos, la delación inducida por el pago es vergonzosa, degradante y peligrosa. De igual forma, deberíamos tener instituciones de seguridad lo suficientemente sólidas para dar resultados sin tener que pagar. Por último ¿En manos de quién están quedando estos dineros? ¿A quién estamos perdonando por acusar a sus jefes? Me atrevo a decir que con estos dineros no se harán muchas obras de caridad, ni se invertirá en proyectos que generen valor al país, eso al final no es tan importante. Duele y preocupa la impunidad, perdonar al número dos de una organización por capturar o dar de baja al número uno es incorrecto y por sus manos igual están manchadas de sangre.

Dejo algunas caricaturas de Vladdo que ilustran esta horrible situación:





Un Mal Chiste

La música es buena, la fotografía no está mal, conceptualmente la logran ¿Pero por qué usan al cuenta huesos? En su afán por enviar un mensaje que le llegue a muchas personas, especialmente de estratos bajos, Coca Cola se apoya en la figura del humorista colombiano para su último comercial, completamente válido; pero la consistencia en el mensaje debe darse por varias figuras públicas contagiadas con la frescura de la bedida y no por las acciones ridículas del también conocido Alerta. Para mí, existe un riesgo enorme en dejar una muy buena idea en manos de una figura que genera tantos amores como odios, usar otras celebridades criollas con una misma idea, con la excelente producción de este comercial puede convertirse en la versión cola del famoso “Got Milk?”