El TLC se La Juega

Debo aclarar que no sé nada de política exterior, e irresponsablemente no me he detenido a estudiar los posibles efectos del TLC en la economía colombiana, pensaría que como en cualquier tratado de esta naturaleza algunos sectores se benefician y otros sufrirán las drásticas consecuencias de no ser competitivos o de no tener un gobierno rico que los subsidie. Pero el asunto no es ese, la suerte ya está echada y hoy Colombia empieza a jugársela en un congreso que parece no querer aprobar este tratado, sin importar lo que digan el presidente de Estados Unidos y de Canadá.
Mi lectura de los hechos es la siguiente, Bush, al mejor estilo de Poncio Pilatos decidió lavarse las manos y a pesar de las múltiples advertencias presentar un proyecto que desde mi visión pesimista, está muerto. Creo que no tiene nada que perder, si el proyecto se hunde, por lo menos lo intentó y no fue su culpa, los demócratas son los culpables, si el proyecto sale adelante queda como el gran benefactor de Colombia. En este momento en el que las elecciones son el factor determinante en la toma de decisiones del congreso americano un TLC con Colombia no cae para nada bien y con seguridad irá en detrimento de los resultados del partido que lo apoye.

Quiero rescatar algunas ideas del discurso del presidente esta mañana:

· Colombia ha hecho lo que se le ha pedido para la aprobación del TLC.
· Se acaba de firmar un tratado de características similares con Perú.
· Hoy, el 90% de los productos colombianos llegan sin arancel a Estados Unidos, por lo tanto el efecto es el mismo que hoy vive la economía gringa.
· Por el contrario, los productos americanos ingresan a Colombia con el 35% de impuesto y al eliminarlo con seguridad aumentaría la demanda de los mismos.
· Colombia es el único “aliado” incondicional de Estados Unidos en la región, cerrarle esta puerta no solo es jugar sucio sino permitir que los grupos “terroristas” puedan consolidar su presencia en la zona.

No nos queda más que esperar.